Tosa de Mar, el paraíso azul de la costa catalana

Tosa de Mar (Tossa de Mar en catalán) es una preciosa localidad catalana de la Costa Brava, situada a medio camino entre la ciudad de Barcelona y la frontera francesa, a aproximadamente 100 kilómetros de distancia. Esta pintoresca población gerundense que pertenece a la comarca de La Selva destaca principalmente por su deslumbrante casco histórico amurallado, uno de los más bonitos y mejor conservados de España, y el entorno natural privilegiado que lo rodea  

El ilustre pintor francés de origen bielorruso, Marc Chagall, condecorado con la orden de la Legión de Honor de Francia y autor de destacadas obras en la Ópera de París o en la Metropolitan Opera House de Nueva York, entre otros reconocidos trabajos, quedó maravillado con Tosa de Mar allá por los principios de los años 30 y la bautizó como “el paraíso azul”.

Años después en 1950, la mítica actriz estadounidense, Ava Gardner, junto al actor británico, James Mason, también sucumbieron a los encantos de Tosa de Mar cuando vinieron a rodar en este municipio de la Costa Brava la película Pandora y el holandés errante, dándolo a conocer internacionalmente antes de la llegada del boom turístico a la zona. El paso de la estrella americana quedó inmortalizado al erigirse en su honor una estatua en tamaño real en un bonito mirador de la villa.    

Rico patrimonio arquitectónico y cultural

Este maravilloso pueblo medieval atesora mucha historia a sus espaldas y cuenta con un rico patrimonio arquitectónico, artístico y cultural. Un punto de partida ideal para descubrir todos sus secretos es iniciar el recorrido en el fotogénico castillo de Tosa de Mar. Construido entre los siglos XII y XIV como defensa contra la piratería, es el único ejemplo de población medieval fortificada que todavía existe en la costa catalana y se trata sin duda del símbolo y buque insignia de la localidad. 

La mejor forma para acceder a la fortificación es hacerlo a través de la Vila Vella, el pequeño centro histórico de Tosa de Mar compuesto por estrechas calles empedradas y donde se esconden rincones llenos de encanto. Recorrer el emblemático recinto amurallado tanto de noche como de día es un auténtico lujo que no deja indiferente a nadie y no consta decir que las vistas desde aquí al mar Mediterráneo y al resto del pueblo son increíbles. También son espectaculares y muy recomendables las vistas desde el faro de Tosa, situado en la parte más elevada de la muralla.

Contiguo a la Vila Vella se encuentra el barrio de sa roqueta, antiguo barrio de pescadores que con sus casas blancas y sabor a mar sigue manteniendo ese espíritu marinero intacto. Tanto en el barrio de sa roqueta como en el vecino paseo marítimo de Tosa de Mar existe una amplia oferta gastronómica con deliciosos manjares de la región como sus arroces, pescado fresco o marisco. El plato más arraigado a la tradición marinera de la localidad es el ‘Cim i Tomba’, elaborado en una cazuela con pescado del día, hortalizas frescas, patatas y alioli.

Venta de casas en Tosa de Mar

La belleza de este entrañable pueblo de pescadores enclavado en uno de los lugares con más encanto de la Costa Brava ha provocado que en los últimos años la demanda para comprar casas en venta en Tosa de Mar se haya acentuado. Su extraordinario patrimonio histórico junto a unos maravillosos parajes naturales frente al litoral catalán son solo algunos de sus grandes valores añadidos para invertir aquí en un inmueble, fijar una segunda residencia o afincarse de manera permanente.  

Las playas y calas de Tosa de Mar

Otro de los reclamos turísticos más solicitados en la zona son las idílicas playas que rodean Tosa de Mar. El núcleo urbano cuenta con tres hermosas playas de arena dorada y aguas cristalinas. La Playa Grande es la más extensa y está situada en el corazón del pueblo, enfrente del paseo marítimo. En ella se encuentran distintas embarcaciones para visitar las calas y localidades costeras de los alrededores.  

Muy cerca se encuentra la Playa de la Mar Menuda. Equipada con todas las instalaciones necesarias, es perfecta para ir en familia, practicar el snorkel y admirar su rico fondo marino. Posiblemente, la playa más atractiva de Tosa de Mar es la Cala es Codolar. Ubicada a los pies de la muralla, en un enclave asombroso, todavía conserva su esencia mediterránea y los pescadores locales siguen saliendo a faenar diariamente desde aquí con sus embarcaciones que permanecen amarradas en la misma arena.

 El viajero no puede irse de la Costa Brava sin haber recorrido alguno de sus fabulosos caminos de ronda. Desde la playa grande de Tosa de Mar hasta Cala Pola transcurre uno de los más bonitos de la región a través de sorprendentes acantilados y varias calas recónditas. Un inmejorable emplazamiento para disfrutar de unas vistas panorámicas fantásticas y pegarse un refrescante chapuzón.

¿Quiere comprar una vivienda en Tosa de Mar para pasar unos meses de vacaciones al año o para instalarse allí definitivamente? Contacte ahora con nuestra agencia inmobiliaria en Tosa de Mar y le ayudaremos a encontrar el apartamento, casa o villa que siempre ha soñado.